Con el Hockey en Mendoza
Ya lo dije en el sitio web, la primera gira oficial de la rama de hockey césped de Old Mackayans fue todo un éxito. Cuatro días donde lo pasamos espectacular, nos hicimos más amigos que antes, con algo que recordar el resto de nuestras vidas. Ir a Mendoza y defender los colores azul y blanco es simplemente de otro planeta.
Cuando la delegación de 25 chicos y chicas (claro que unos más viejos que otros) partimos desde el Colegio Mackay el viernes 6 de octubre, no teníamos tan claro contra quién jugaríamos, ni siquiera si había partidos confirmados. Pero la buena fortuna nos acompañó desde el inicio. La suerte nos permitió encontrarnos con Eduardo “Lalo” Martínez, jefe del Departamento de Deportes del Mackay en el Paso Cristo Redentor. Ahí nos dio la primera buena noticia: la escuadra femenina tenía un partido fijado para el día sábado a las 16:30 horas. Si el ánimo era alto, con esto ya la alegría nos desbordaba.
Sin embargo, el mal rato vino dos horas después, cuando a Pedro Sánchez (español que había jugado hockey por primera vez dos días antes), no le permitieron el ingreso a Argentina. A pesar del pataleo y las largas discusiones, la mala voluntad de ciertas personas impidió que Pedro pudiera cruzar la frontera, por lo que debía volverse a Viña del Mar, y para no irse solo, Gustavo Duarte lo acompañó. Así, con dos menos, tuvimos que seguir a Mendoza, llegando al Life House Hostel luego de diez largas horas de viaje.
Al otro día nos levantamos temprano. La idea era dar un paseo por el centro, almorzar y luego ir al partido contra Obras Mendoza. Pero antes de partir, ¡Oh Sorpresa! Pedro y Gustavo habían llegado de madrugada al Hostel. ¿Qué había pasado? En el Paso Los Libertadores le dieron la autorización al español para cruzar la frontera, y luego de dos largos viajes en camión, llegaron a las SIETE DE LA MAÑANA. Sólo faltaba que llegara el Seba Spanger, y completábamos los 26 para la gira (cosa que ocurrió en horas de la tarde).
Pero vayamos al partido de la tarde. Fernando del club Los Tordos nos paso a buscar a las tres de la tarde para indicarnos cómo llegar a la cancha de Obras Mendoza. Ahí nos encontramos con la sorpresa que la cancha no era de pasto natural o sintético, sino que de arcilla, superficie a la que están muy acostumbradas las trasandinas. Las chicas se enfrentaron a un cuadro muy experimentado, que tenía en sus filas a tres ex “Leonas” (seleccionadas argentinas).
Si bien el partido se dio de manera muy pareja en el primer tiempo, fueron las dueñas de casa las que se quedaron con el triunfo con un marcador de dos tantos contra cero. Una pena perder el primer partido, pero la experiencia de jugar en condiciones adversas y con un calor increíble, de seguro será bien aprovechado en el futuro.
En el “tercer tiempo” hicimos muy buenos amigos. La gente de Obras Mendoza nos atendió como se debe hacer a una visita. Y de hecho, entre bebidas y cervezas, se programó un segundo partido para el domingo, pero esta vez entre hombres, por lo que los muchachos ya no sólo iban a pasear, ahora tenían que jugar.
Para la noche planeamos una hamburguezada, la que resultó muy entretenida. Fue ahí donde muchos de nosotros pudieron conocer de verdad a varios que componían la delegación. La música, la buena compañía y las risas fueron la tónica de una noche mágica, y si bien no salimos a ningún lado a bailar, el “asado” resultó muy bueno.
El domingo fuimos rápidamente (los que pudieron levantarse) al mall, y en la tarde fue el turno de los hombres para jugar su primer partido internacional. El equipo de Old Mackayans llegó bien reforzado a este duelo, y el hecho anecdótico más relevante, sin lugar a dudas, fue la apertura de la cuenta por obra y gracia de John Enos. Sí, tío John, con su cintillo sesentero, para la primera conquista de la gira. El partido terminó 2 a 1 para nosotros, con el gol final de Julio Montiel.
Y por último, gracias a que existían ganas de seguir jugando, se disputó un segundo partido de manera mixta (hombres con mujeres). Éste fue el más entretenido de todos, ya que finalizó con empate a tres, y se daba así por terminada la gira deportiva, que nos enseñó mucho, y además hicimos nuevos amigos.
De esta manera volvimos el lunes muy temprano en la mañana, a eso de las 7:30 horas, para llegar a Reñaca a las dos y media de la tarde. Llegamos todos cansados, pero muy contentos, porque se cumplió un sueño muy anhelado por la rama de hockey, que era representar a Old Mackayans fuera de tierras nacionales, adquirir experiencia y crear un vínculo que nos dejará marcados.
Los felicito a todos y espero que volvamos a repetir estas experiencias en un futuro no muy lejano. También espero que lo hayan pasado muy bien y ahora a pensar en la gira 2007.
Para la historia:Cuando la delegación de 25 chicos y chicas (claro que unos más viejos que otros) partimos desde el Colegio Mackay el viernes 6 de octubre, no teníamos tan claro contra quién jugaríamos, ni siquiera si había partidos confirmados. Pero la buena fortuna nos acompañó desde el inicio. La suerte nos permitió encontrarnos con Eduardo “Lalo” Martínez, jefe del Departamento de Deportes del Mackay en el Paso Cristo Redentor. Ahí nos dio la primera buena noticia: la escuadra femenina tenía un partido fijado para el día sábado a las 16:30 horas. Si el ánimo era alto, con esto ya la alegría nos desbordaba.
Sin embargo, el mal rato vino dos horas después, cuando a Pedro Sánchez (español que había jugado hockey por primera vez dos días antes), no le permitieron el ingreso a Argentina. A pesar del pataleo y las largas discusiones, la mala voluntad de ciertas personas impidió que Pedro pudiera cruzar la frontera, por lo que debía volverse a Viña del Mar, y para no irse solo, Gustavo Duarte lo acompañó. Así, con dos menos, tuvimos que seguir a Mendoza, llegando al Life House Hostel luego de diez largas horas de viaje.
Al otro día nos levantamos temprano. La idea era dar un paseo por el centro, almorzar y luego ir al partido contra Obras Mendoza. Pero antes de partir, ¡Oh Sorpresa! Pedro y Gustavo habían llegado de madrugada al Hostel. ¿Qué había pasado? En el Paso Los Libertadores le dieron la autorización al español para cruzar la frontera, y luego de dos largos viajes en camión, llegaron a las SIETE DE LA MAÑANA. Sólo faltaba que llegara el Seba Spanger, y completábamos los 26 para la gira (cosa que ocurrió en horas de la tarde).
Pero vayamos al partido de la tarde. Fernando del club Los Tordos nos paso a buscar a las tres de la tarde para indicarnos cómo llegar a la cancha de Obras Mendoza. Ahí nos encontramos con la sorpresa que la cancha no era de pasto natural o sintético, sino que de arcilla, superficie a la que están muy acostumbradas las trasandinas. Las chicas se enfrentaron a un cuadro muy experimentado, que tenía en sus filas a tres ex “Leonas” (seleccionadas argentinas).
Si bien el partido se dio de manera muy pareja en el primer tiempo, fueron las dueñas de casa las que se quedaron con el triunfo con un marcador de dos tantos contra cero. Una pena perder el primer partido, pero la experiencia de jugar en condiciones adversas y con un calor increíble, de seguro será bien aprovechado en el futuro.
En el “tercer tiempo” hicimos muy buenos amigos. La gente de Obras Mendoza nos atendió como se debe hacer a una visita. Y de hecho, entre bebidas y cervezas, se programó un segundo partido para el domingo, pero esta vez entre hombres, por lo que los muchachos ya no sólo iban a pasear, ahora tenían que jugar.
Para la noche planeamos una hamburguezada, la que resultó muy entretenida. Fue ahí donde muchos de nosotros pudieron conocer de verdad a varios que componían la delegación. La música, la buena compañía y las risas fueron la tónica de una noche mágica, y si bien no salimos a ningún lado a bailar, el “asado” resultó muy bueno.
El domingo fuimos rápidamente (los que pudieron levantarse) al mall, y en la tarde fue el turno de los hombres para jugar su primer partido internacional. El equipo de Old Mackayans llegó bien reforzado a este duelo, y el hecho anecdótico más relevante, sin lugar a dudas, fue la apertura de la cuenta por obra y gracia de John Enos. Sí, tío John, con su cintillo sesentero, para la primera conquista de la gira. El partido terminó 2 a 1 para nosotros, con el gol final de Julio Montiel.
Y por último, gracias a que existían ganas de seguir jugando, se disputó un segundo partido de manera mixta (hombres con mujeres). Éste fue el más entretenido de todos, ya que finalizó con empate a tres, y se daba así por terminada la gira deportiva, que nos enseñó mucho, y además hicimos nuevos amigos.
De esta manera volvimos el lunes muy temprano en la mañana, a eso de las 7:30 horas, para llegar a Reñaca a las dos y media de la tarde. Llegamos todos cansados, pero muy contentos, porque se cumplió un sueño muy anhelado por la rama de hockey, que era representar a Old Mackayans fuera de tierras nacionales, adquirir experiencia y crear un vínculo que nos dejará marcados.
Los felicito a todos y espero que volvamos a repetir estas experiencias en un futuro no muy lejano. También espero que lo hayan pasado muy bien y ahora a pensar en la gira 2007.
Arriba: John Enos, Carolina Julio, Bárbara Brain, Loreto Reyes, Paulina Collado, Kathy Enos, Leilany Marín, Javiera Hormaechea, Maureen Mc Cawley, Gustavo Duarte, Pedro Sánchez, Michael Fernández, Pablo Urrejola, Julio Montiel, Francisco Ortega.
Abajo: Josefina Borja, Gaby Lira, Teresita Vidal, Macarena Peña, Willy Enos, Álvaro Campos, Francisca Bardi, Belén Vallejo, Matías Seccatore.